LA LARGA SOMBRA DE LA MENTIRA. ¡QUE LO DIGA PIO XII!

El Papa de Hitler, silencioso, pasivo, antisemita... Estos son algunos de los apodos que acompañan a menudo el nombre de Eugenio Pacelli, el gran Pío XII.

Lo curioso es que desde el final de la Segunda Guerra Mundial hasta su muerte, Pío XII recibió efusivos elogios de una multitud de Judios anónimos, además de varios "famosos" que comunicaron públicamente su gratitud. Entre estas personas famosas se cuentan nada menos que Albert Einstein el científico (sí, el propio), el Gran rabino de Jerusalén, Yitzhak Herzog, y la ex primera ministra y una de las fundadoras del Estado de Israel, Golda Meir.  Hmmm... ¿Era esta gente imbécil? No lo creo.

Pío XII salvó más judíos que cualquier otra persona, incluyendo Oskar Shindler. Rodeado de espías, amenazas de muerte y llevando sobre sus hombros el peso de la responsabilidad sobre las vidas de millones de católicos europeos, abrió las puertas del Vaticano, conventos, iglesias y escuelas católicas para albergar a fugitivos judíos.

Según un estudio reciente (1) de la Pave the Way Foundation, había 12.428 Judios en Roma durante la invasión nazi en 1943. La acción directa de Pío XII evitó que más de 11.400 judíos romanos fueran deportados a Auschwitz. Y eso sin contar los miles de otros judíos salvados por católicos por Europa adelante.

Sin embargo, después de que Pío XII pasase a mejor vida, en 1958, se inició una campaña descarada y exitosa por parte de los enemigos de la Iglesia - léase políticos e intelectuales comunistas - para empañar su imagen. Como, por desgracia, la mayoría de la gente se deja comer el tarro sin atenerse a los hechos, uno de los mayores benefactores de la historia del pueblo judío pasó de héroe a títere nazi en un abrir y cerrar de ojos.

(…) En el site de la Pave the Way Foundation, cualquiera puede examinar personalmente todos los documentos y videos sobre las acciones de Pío XII durante la Segunda Guerra Mundial: www.ptwf.org.


"Sólo la Iglesia permaneció de pie y firme para hacer frente a las campañas de Hitler para suprimir la verdad.
Antes no había sentido ningún interés personal en la Iglesia, pero ahora siento por ella gran afecto y admiración, porque sólo la Iglesia ha tenido la valentía y la obstinación de sostener la verdad intelectual y la libertad moral. Debo confesar que lo que antes despreciaba ahora lo alabo incondicionalmente".
(Albert Einstein, 23.12.1940 - Revista "Time")

"Cuando el martirio más espantoso ha golpeado a nuestro pueblo, durante los años del terror nazi, la voz del Pontífice se ha levantado a favor de las víctimas. Por eso lloramos la pérdida de un gran servidor de la paz".
(Golda Meir, una de las fundadoras del Estado de Israel y Primera Ministra entre 1969 y 1974, a la muerte de Pío XII)


"Una condena pública más fuerte habría provocado represalias nazis contra los clérigos católicos en Alemania y países ocupados. También pondría en peligro la vida de miles de judíos ocultos en el Vaticano y en las iglesias y conventos de Italia, y de los católicos que los protegían".
(David G. Dalin, rabino e historiador estadounidense, autor de El mito del Papa de Hitler)


(1) Agencia de Noticias Zenit. Pío XII salvó 11 mil judíos romanos. 29/07/2011

Fuente: OCatequista